El K2 abría la decimosexta jornada de liga recibiendo al
Unión Collado Villalba. Un equipo joven situado en mitad de la tabla. El
partido no se preveía fácil , y es
que, los mejores resultados de los visitantes han sido siempre cuando han
jugado con los equipos de arriba.
Los locales estrenaban horario , las 9 de la mañana. Pero lo
cierto es que el horario no debe, ni puede, condicionar un partido… sino ser
simplemente una mera anécdota.
Lo locales salieron fríos y espesos. Tanto, que apenas
habían pasado cinco minutos, cuando el equipo visitante se adelantaba en el
marcador. Un balón que el 9 de ellos gana entre tres defensas y el rechace le
cae al interior izquierdo que la rompe sin que el portero local pueda hacer
nada. Inexplicable que un jugador saque un pase rodeado de tres defensas.
No había dado tiempo a romper sudar, a que faltara el
aliento, y el K2 ya tenía el marcador en contra. A pesar de todo, los locales
quisieron espabilar pero no fueron capaces de hacerlo. Apenas consiguieron ocasionar peligro
alguno al portero visitante. Pases imprecisos, controles largos, faltas
absurdas y unas segundas jugadas que fueron siempre para los de Villalba. Hoy no salía nada de lo que tenía que salir.
Los visitantes estaban cómodos con el marcador, y cómodos en
el campo. Jugaron sin presión, sin agobios y sin prisas. Movían el balón sin
grandes dificultades y esperaron, más que buscaron, la oportunidad de hacer el
segundo.
En esas se nos fue el primer tiempo. Un K2 incapaz de
generar peligro arriba y un Villaba al que le estaba gustando el devenir del
partido.
La segunda parte fue mejor para el K2, quién tenía que ganar
un partido que se le había puesto muy cuesta arriba. El U.C.Villaba ya no
estaba tan cómodo y le costaba mucho más mover el balón. De ahí que en muchos minutos
del partido, el K2, le atrincherara en su campo. Su buena defensa supo frenar ,
una y otra vez, las embestidas locales, que seguían sin ser claras en los
últimos compases.
En el 55´ Santi
era sustituido por Javi, quién pasaba a ocupar el centro del campo, mientras
Antonio pasaba a defender el lateral derecho. A partir de entonces, los locales comenzaron una y otra vez
a poner balones largos para que los pelearan los de arriba. Y ahí, hoy, tampoco salió demasiado bien.
El Villalba, conformado con el 0-1, lo intentaba poco pero
siempre con criterio y generando cierto peligro a los locales. Había que buscar el gol . El entrenador
del K2 arriesgó y se quedó con defensa de tres.
La segunda parte estaba a punto de esfumarse, y con ella los
tres puntos. Ya pasaba el minuto 83´ cuando el extremo local empalmaba un
rechace, que se colaba en la portería, tras superar el pelotón de jugadores en
el área. Buen remate, alto y
colocado. El portero visitante, poco o nada pudo hacer, ante la poca visibilidad.
El K2 empataba el partido y fue entonces cuando
verdaderamente se vino arriba. Ya era tarde para más y el Villalba tenía claro
que había perdido dos puntos que durante más de 80 minutos fueron suyos.
El K2 suma un punto pero hoy toca reflexionar. Reflexionar
si realmente merece la pena madrugar y no dejarte la vida en el campo, si ayer
te acostaste pronto pensando que hoy te ibas a comer al contrario… Y es que, a
estas alturas de la competición, se acabaron los titubeos, las dudas, las medias
tintas. Ya no hay tiempo, no hay
margen para el error. Si queréis estar ahí arriba, luchar con y como los
grandes, ser conscientes de que ya no hay partidos para que os vayáis pensando
que pudisteis dar mucho más. Lo mejor de ti, de vosotros, tiene que llegar YA,
y lo que es más importante…. Tiene que permanecer!
No hay comentarios:
Publicar un comentario